Crema Nutritiva Antiedad Yeidra

Son esas cosas que sólo pasan muy de vez en cuando. Y cuando probé la Crema Nutritiva Antiedad Premium de Yeidra, ¡pasó!

¡Su composición me gustó muy mucho! Un 99,58 %  de sus ingredientes son de origen natural, además el 94,28 % procedentes de agricultura ecológica. ¡Un INCI así no se ve todos los días! Empezamos muy bien, pensé.

Con bases totalmente vegetales como el Aceite de Argán (regenerador y antienvejecimiento), Aceite de Aguacate (nutritivo, elastizante y regenerador) o el Aceite de Macadamia emulsionados con Hidrolato de Lavanda (otras firmas emulsionan con agua destilada).

En Yeidra eligen como base acuosa el hidrolato de lavanda por su gran poder regenerador de pieles dañadas o envejecidas.  Por este motivo y porque consideran fundamental su efecto regulador del manto graso de la piel al margen de su tipologia o edad. Y lo potencian con el Aceite de Macadamia, también regulador del manto hidrolipidico.

La lavanda está muy presente en la Crema Nutritiva Antiedad de Yeidra. Además de en su fase acuosa como hidrolato, la incorporan en aceite esencial, lo que le otorga un rico aroma y por sus propiedades bactericidas me parece un verdadero acierto para las que tenemos todas las necesidades de las pieles maduras  y más, pero que no nos acabamos de librar de algún granito de vez en cuando. La lavanda es genial porque nos ayuda a combatir y prevenir la aparición de pequeñas infecciones cutáneas. Este «problemilla» lo acaba de tratar el aceite esencial de limón (que también incorpora en su composición) con gran poder cicatrizante y aclarante de secuelas o manchas. Por lo que  sin llegar a ser una crema despigmentante pura, si que con el tiempo de uso se ve como difumina las manchas que tanto endurecen el rostro. Y acelera la cicatrización de granitos y sus secuelas.

Bueno, lo que más me llamó la atención cuando comencé a aplicar esta crema antiedad fue su magnifica absorción. Funde perfectamente con la piel, es muy palpable que sus ingredientes son puros, ecológicos y totalmente compatibles con nuestra piel. Al fin y al cabo ambos formamos parte de la naturaleza y eso nos hace afines. ¡No hay más!

Y lo que me acabó de cautivar fue la gran luminosidad que aportó a mi piel acompañada por un efecto «lifting-tensor» muy, pero que muy evidente. Eso sí,  sin tiranteces. Piel tonificada, pero jugosa y confortable. ¡Pleno al 15!

Resumiendo: Acabado mate, gran luminosidad y evidente firmeza desde prácticamente la primera aplicación.

Y es que la Crema Nutritiva Antiedad Premium de Yeidra incorpora un activo estrella en su formula…el Aceite de Camelia. Este aceite vegetal y ecológico, claro, goza de unas propiedades cosméticas muy especiales y enormemente activas.  Es un gran renovador-regenerador celular (rejuvenece), aporta y mantiene la hidratación cutanea a largo plazo, protege de los radicales libres y de las agresiones externas y reafirma e ilumina la piel como ningún otro.

El broche final lo pone el aceite esencial de geranio. Perfecto para pieles maduras por sus enormes propiedades reafirmantes.  Además, gracias a la aromaterapia nos podemos beneficiar de su poder  equilibrante hormonal haciéndolo  especialmente apropiado para las mujeres.

La crema nutritiva antiedad de Yeidra está indicada en todo tipo de pieles maduras. Incluso si tu piel es sensible le sentará de maravilla. La calendula y la manteca de karité, también presentes en su composición la calmarán y protegerán.

Si tu piel madura es seca, está muy castigada, vives en un clima seco o en épocas de frío se seca más de la cuenta puedes reforzar la crema nutritiva antiedad con el serum antiarrugas de Yeidra de textura oleosa y con gran aporte en nutrientes.

Las necesidades de las pieles maduras de tipologia mixta o grasa, salvo excepciones, están totalmente cubiertas usando sólo la crema nutritiva antiedad Premium de Yeidra.

Si estás buscando algo diferente, una crema ecológica que despierte e ilumine tu piel. ¡No puedes perdértela!

Quienes me conocéis tiempo sabéis que siempre aconsejo  cambiar con mucha frecuencia de crema. Según la estación, el estado y la necesidad de la piel en cada momento y por supuesto, para que pueda cambiar de activos y responda mejor a ellos. Pues tengo que confesar que después de mi primera crema nutritiva antiedad Yeidra me quedé con ganas de más. Fui incapaz de usar un sólo envase. Repetí. Hasta ese momento era impensable para mí usar el mismo cuidado sin periodo de descanso. Yeidra rompe moldes, y yo no podía dejar el tratamiento mientras siguiese actuando como solo lo hacen otros cosméticos las primeras puestas, cuando los activos son nuevos para la piel y esta responde de maravilla.

Son muchos los cosméticos que llego a testar y consumir cada año y si me he decido a escribir un post especifico  sobre la Crema Nutritiva Antiedad de Yeidra, es porque tanto su composición como su eficacia son destacables  y muy especiales.

Espero que te guste tanto como a mí.

Amparo.